Libros.

La verdad es que no se como decir esto, sin parecer una loca al teclado. Hace unos días; el miércoles para ser más preciosos, me regalaron el primer libro de la saga " de la que todo el mundo habla"; Las Cincuenta sombras.Desde entonces, me enfrasqué en su lectura y no he podido parar de leer. Para entonces, al día siguiente ya me lo había acabado. Ansiosa por seguir conociendo y desentrañando la erótica y extraña historia de amor, le pedí a mi chico, que me devolviera un dinero que días antes me había gastado comiendo en el Burger King. Ahora mismo me sorprendo de la fuerza de voluntad que estoy teniendo, dejando el tercer libro aparcado en mi estantería, a mitad de leer. Volviendo a la petición de dinero. Se que estuvo mal pídeselo.  En verdad, días antes me invitó a comer a ese sito, me lo debía . De algún modo me lo debía. A él no le hizo mucha gracia que me tirara tooooooda la tarde leyendo; y la mañana, pero no existía cosa que me apeteciese más en ese momento. Incluso ÉL, podía esperar. Era jueves, y tenía que marchar a casa. Mi chico. Como es tan sumamente bueno, aunque a veces me cueste reconocerlo, paró en el Carrefour dispuesto a comprarme el segundo libro Las cincuenta sombras más oscuras. Los ojos me brillaron del agradecimiento, no obstante cuando nos despedíamos sacó de su regazo un tercer.¡ Oh, que feliz me hizo!Fue ese miércoles cuando empezó todo.Hoy es sábado, y hasta ayer bien entrada la noche, no pude parar de leer. Ya mis ojos cansados, o no, pararon. Lo asombroso ha sido la magnitud con la que me transportó, me sigue transportando. He vivido con la misma intensidad que los protagonistas cada palabra escrita por la autora. Me he reído, pero también he llorado mucho. Más que mucho diría yo. Cuantas veces pensé para mi : ¡ Ojala esa historia fuese la mía! Ya no por la perversión, que la dejaría a un lado, tampoco por los millones del señor Grey, o por su inmensa casa repleta de historias oscuras. Yo quise ser ella, señor Grey, lo quise. Es un gran giro el que trae consigo el segundo libro. Muestra el cambio gradual del atractivo señor Grey. Dios..es, simplemente todo lo que hace por ella, y haría por ella si  dudar.Es esa necesidad de sobreprotección, esos intensos celos, esas ganas, ese énfasis por que sea suya, y lo grita, lo grita mil veces; Eres mía Anastasia. La necesidad de que te necesiten, de que te amen por encima de cualquier cosa. Si, estarán pensando que soy una loca. Pues sí, soy una loca del amor, de lo romántico, de las historias bonitas..Les confieso que desde el miércoles, en lo primero en lo que pienso al despertar, es en seguir leyendo mis maravillosos libros. Ahí tengo el tercero. Pero ya he descuidado lo suficiente mis obligaciones con respecto a los estudios. Me toca hincar un poco los codos, sumergirme en mi adorada pscología, y luego, ya veremos. Esta es la magia que traen consigo los libros. Son capaces de transportarte a los lugares más inhóspitos. A las historias más bellas. No quiero pensar en como me sentiré cuando me acabe el tercer libro. Presiento una pena muy grande, he dedicado estos tres días íntegros a mi lectura. Después de todo, todo lo que empieza, ACABA.¿ Es normal sentir dolor leyendo?¿ Sentir nervios, contracciones en el abdomen? Eso he sentido yo estos tres últimos días. He sentido como si yo fuese la protagonista, pensando en mi primer encuentro. No quiero que me afecte, después de todo es un libro,ficción. No quiero que me afecte...